20 pimientos del piquillo (3 ó 4 por persona, mas 3 ó 4 para la salsa)
3 morcillas de cebolla
2 cebolla
1 diente de ajo
Caldo de carne
Aceite de oliva
Sal
Azúcar Preparación: Ponemos a rehogar una de las cebollas en una sartén con un poco de aceite hasta que empiece a transparentar, quitar la piel a las morcillas y poner el interior de estas en la sartén junto con la cebolla y con ayuda de una espátula deshacer bien las morcillas y conseguir que se integre con la cebolla. Dejar enfriar. Rellenamos los pimientos (menos 3 ó 4 que usaremos para la salsa) con la morcilla que teníamos enfriando. Los colocamos en una fuente de horno y le ponemos la sal, el azúcar y un chorrito de aceite por encima de cada pimiento. Horneamos a 180º C con el horno precalentado unos 15 minutos. Para hacer la salsa pochamos la cebolla y el ajo, añadimos los pimientos que habíamos reservado y rehogamos. Mojamos con caldo y dejamos que hierva 20 minutos. Trituramos la salsa y la colamos. Colocamos un poco de salsa en un plato y encima disponemos los pimientos.
Buenísimos, y muy originales. Bss.
ResponderEliminarTienen que estar divinos. Me has dado una idea para aprovechar, pero bien, un bote de pimientos que tengo en la nevera, y una morcilla de arroz. Imagino que las morcillas que tú has empleado son pequeñas, ¿verdad?
ResponderEliminarBesos.
Yolanda, las morcillas eran de tamaño normal, como 4 dedos de largo.
ResponderEliminarMe alegro de que te hayan gustado.
Besitos